Chamulleros

Ella busca entre los perdidos,

cree en los solitarios.

Se sumerge entera. 

Pero esta vez,

en un trance de promesas que la persiguen virtualmente,

la enamoran las pequeñas cosas,

los gestos mágicos, 

tres pisos, dos gatos, un niño.

Se imagina un despertar en conjunto,

en una misma cama y sentimiento,

abrigados por los rayos del sol que hoy sí entran por su ventana.



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